Qué debes saber del peeling
- Si tienes la piel normal o grasa, puedes realizarte un peeling hasta tres veces por semana. Por el contrario, si la tienes seca o sensible, no debes excederte de dos exfoliaciones semanales.
- Consulta con tu dermatólogo o tu asesora de cosmética qué peeling te conviene más, si mecánico (arrastra la suciedad con granulitos) o enzimático (el proceso es químico). Hay gente a la cual los mecánicos le resultan muy agresivos, especialmente a las sensibles, y al contrario. ¡Ensayo-error!
aplicar exfoliante - Los exfoliantes no sólo ayudan a limpiar la piel en profundidad, sino que son un excelente aliado para que los productos que apliques a continuación hagan más efecto porque penetrarán mejor sobre la piel limpia. - Te recomendamos que te realices los peelings por la noche o que, si lo haces por la mañana, no te olvides la pantalla solar para proteger.
- Ten mucho cuidado con la zona del contorno de los ojos y de los labios, no apliques el producto allí. Al contrario, no te olvides del cuello y del escote, que debes tratar como si fueran la piel del rostro.
- El peeling es un imprescindible antes de aplicar autobronceadores porque ayudarán a que el producto quede más uniforme y natural.
Cosas que no debes hacer
- No por hacerte múltiples exfoliaciones tu piel tendrá mejor aspecto. De hecho, la puedes sensibilizar y debilitar. Sigue las instrucciones del producto al pie de la letra, y si pone que lo apliques dos o tres veces por semana, cíñete a esa frecuencia.
- No tomes el sol inmediatamente después de un peeling.
- No te olvides de aplicar una crema hidratante después de la exfoliación que nos ayude a nutrir la piel y a cerrar los poros.
- Cuidado con los exfoliantes mecánicos: extiéndelo suavemente sobre el rostro con los dedos corazón y anular, sin hacer presión. Si utilizas demasiada fuerza podrías provocar micro-heridas en el cutis.
- No te hagas un peeling el día antes de un acontecimiento muy importante porque puede tener pequeños efectos adversos como enrojecimiento o irritación.
Falsos mitos sobre el exfoliante
- El más común es que hace que tu bronceado desaparezca. ¡Falso! Actúa a un nivel superficial que, de hecho, lo que produce es una limpieza que a las pocas horas revela un color más luminoso y uniforme.
- Es mejor peeling el que tiene una textura con gránulos: absolutamente falso. Los de ación química producen una reacción ‘corrosiva', es decir, que elimina de forma suave y controlada las capas de células muertas e impurezas. Se suelen realizar con ácido glicólico, salicílico o cógico, entre otros, que pueden llegar a ser mucho más eficaces que los productos de arrastre.
- Los exfoliantes secan la piel. ¡Mentira! Actualmente se formulan con texturas cremosas e hidratantes, aunque es imprescindible que inmediatamente después de aplicarlo te hidrates la piel correctamente.
- Las pieles secas no necesitan exfoliación. ¡¿Desde cuándo?! El peeling no es territorio exclusivo de los cutis grasos y con granitos, ni sirven sólo para purificar el exceso de sebo. Muy al contrario, también sirven para devolver la luminosidad a la piel y dejarla con un aspecto radiante, algo que la piel seca pide a gritos.
Fuente: www.cosmohispano.com